Creación versus Evolución

Creación versus Evolución

Recientemente escuchaba a una charla de un adventista prominente sobre la importancia de conocer la historia del cristianismo.  Dijo que también necesitamos conocer la historia de Cristianismo a la luz del cumplimiento de las profecías.  Él fue Apocalipsis 11 e identifico a la bestia que sale de la *fosa, como Francia durante la Revolución francesa. ¿Que estaba sucediendo entonces? Los franceses rechazaron todo lo que tenía que ver con Dios en reacción a miles de años de opresión católica. El concepto de Dios que la Iglesia católica romana había presentado a través de todos estos años era impensable para la élite intelectual francesa. ¿Cómo puede Dios ser un Dios de amor, justicia y paz y quedarse observando todo el sufrimiento, injusticia y violencia en el mundo? Además, ¿cómo puede Dios ser un Dios de gracia y perdón y aún ser tan cruel para castigar a los pecadores por una eternidad? ¿Cómo puede decir Dios que es el Dios de los pobres, mientras que la nobleza Rica pretende ser favorecidos por él, incluso cuando eran abusivos y despóticos hacia sus semejantes? La imagen despótica punitiva de Dios no le hizo sentido a los franceses, por lo que rechazaron a Dios por completo. Como podemos ver el ateísmo moderno no nace acerca de la investigación científica y sus avances, pero por inquietudes y  preocupaciones teológicas.

Este rechazo de Dios y la Biblia, a continuación, plantea un desafío para explicar los orígenes de nuestro planeta y la humanidad. Sin embargo, la teoría más popular no surgió de un deseo de dar una alternativa científica a la cuestión de los orígenes, sino como una necesidad de entender la creación desde un punto de vista de una imagen de Dios que era insostenible a Charles Darwin.

Contrario a las concepciones populares, Charles Darwin trabajó en su teoría de la evolución de una premisa teológica.  Lo expresó así: "me parece a mi," escribió Darwin, "que hay demasiada miseria en el mundo. no me puedo convencer que un Dios benéfico y omnipotente hubiese diseñado y creado  [avispas parásitas] con la intención expresa de que su alimentasen del cuerpo vivo de larvas, o que el gato deba jugar con ratones."

Por supuesto un "Dios omnipotente y beneficente" no hizo tal cosa. Sin embargo, Darwin no podía concebir que quizás de un Dios benéfico y omnipotente que permitiría el pecado que seguir su curso para ejecutar sus fines.  Esto había demostrado que Darwin y los franceses antes que él, no tenía ninguna  idea sobre el gran conflicto.

Por lo que Darwin razonó, así como los franceses algún medio siglo antes que él: Dios no puede existir. Por lo tanto, pensó a Darwin, sin un Dios que hablara las cosas en  existencia, las cosas deben  haber evolucionado. Y la forma en que deben haber evolucionado fue por selección natural y supervivencia del más apto (principalmente adaptabilidad, no necesariamente fuerza).

Esto plantea un desafío para muchos pensadores cristianos que creían que lo que Elena White llama "ciencia así llamada" tenían puntos válidos en la teoría de la evolución, por lo que combinan ambos métodos la evolución teísta. Esta teoría dice que Dios usó la evolución para crear el mundo. Es decir, la historia de la creación de 7 días es nada sino una metáfora para describir lo que Dios hizo a través de millones de años. En esencia, se proponen que Dios creó el mundo o el universo, lo dejo por cuenta propia para desarrollar durante un período determinado de tiempo y reaparecieron para otorgar un "alma" de los homínidos que habían evolucionado mientras él no estaba.

Esta visión plantea otros problemas. Entre otras cosas, niega el origen del pecado y la necesidad de redención. También convierte los Evangelios en los cuentos de hadas. Si Dios no hablo y sucedió (Salmo 33:9), entonces Cristo tampoco podría hacerlo. Si no hubo milagros, entonces no hay ninguna resurrección, y por lo tanto, no hay esperanza; pues como dice Pablo, sin resurrección trabajamos en vano (1 Corintios 15:4).

La Biblia es clara acerca de la literalidad y la legitimidad de la historia de la creación. Tomemos por ejemplo Hebreos 11:3,

Hebreos 11:3 Por la fe entendemos haber sido constituido el universo por la palabra de Dios, de modo que lo que se ve fue hecho de lo que no se veía.

Pablo aquí está claro que las cosas no evolucionan; no aparecen de las cosas que existían antes. La palabra de Dios las hizo aparecer.  Dios habló y fue hecho (Salmo 33:9). Los siguientes versículos insisten en que la narración de Génesis era real,

Colosenses 1: 16 Porque en él fueron creadas todas las cosas, las que hay en los cielos y las que hay en la tierra, visibles e invisibles; sean tronos, sean dominios, sean principados, sean potestades; todo fue creado por medio de él y para él.

Colosenses 1: 17 Y él es antes de todas las cosas, y todas las cosas en él subsisten;

Juan 1: 1 En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios.

Juan 1: 2 Este era en el principio con Dios.

Juan 1: 3 Todas las cosas por él fueron hechas, y sin él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho.

Romanos 1:20   Porque las cosas invisibles de él, su eterno poder y deidad, se hacen claramente visibles desde la creación del mundo, siendo entendidas por medio de las cosas hechas, de modo que no tienen excusa.

 

Las siguientes citas muestran que a lo largo de todo su Ministerio, Ellen G. White fue un-compromising en su rechazo de la teoría de la evolución.  Ella escribió:

"Es la peor clase de deslealtad; para muchos que profesan creer en el registro de la creación, es deslealtad disfrazada" (ST, 20 de marzo de 1879).

"¿Consentiremos nosotros, por el privilegio de rastrear nuestra ascendencia a través de gérmenes, moluscos y monos, en desechar esa declaración de la Santa Escritura, tan grandiosa en su sencillez: 'Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó'? (Gén. 1:27)" (Ed 130).

"Cuando el Señor declara que hizo el mundo en seis días y descansó en el día séptimo, se refiere a días de 24 horas, que ha señalado con la salida y la puesta del sol" (TM 136).

 

Podemos ver que para un creyente la creación no debe ser una teoría, sino un hecho. Y, al igual que la creación es un hecho, también es  la Cruz, ya que están íntimamente relacionados. El amor de Dios se muestra en ambos eventos.  No se puede creer en uno de ellos y rechazar el otro.  Eso sería una estupidez.

--
Raul Diaz
www.wolfsoath.com